Otto Dix, pintor alemán (1891 - 1969) |
Still life widow's veil, 1925 |
Entre sus trabajos hay una serie que es especialmente impresionante: Guerra. Una buena parte de esta serie son dibujos sin color en los que se ve, con su estilo, la crudeza de la guerra, de la que sería testigo de excepción al haber sido parte del ejército durante la primera y segunda guerras mundiales.
Para la Primera Guerra, él se enlistó; a la segunda fue obligado a ir. A pesar de eso, el régimen nazi destruyó parte de su trabajo y Otto fue calificado de "artista degenerado". Por fortuna, no todo fue pasto de las llamas, muchas de sus obras sobrevivieron a la censura y al castigo y son exhibidas en muchos museos del mundo. Este hombre es una de aquellas almas sensibles, como Edgar Allan Poe o Rainer Maria Rilke, que tienen experiencias militares que al tiempo que minan sus estados de ánimo son vivencias que saben aprovechar, transformándolas en detonantes de su genio creador. La pintura a continuación por ejemplo, muestra a tres hombres que no son normales, todos tienen amputaciones, heridas, etc. Se llama "inválidos de guerra jugando a las cartas". Después de la guerra la vida sigue, para algunos con menos consecuencias que para otros. ¿Qué pesará más, la herida en el cuerpo, o aquella en el espíritu?
Rusia es uno de aquellos lugares del planeta que he tenido desde siempre en mis afectos. El idioma fue un punto de encuentro desde mi infancia, cuando comencé a aprender -por mi propia cuenta y riesgo- a descifrar los que parecieran jeroglíficos que se me antojaban atractivamente misteriosos. Descifrar. Esa palabra ha estado en mi información genética tal vez, entre mis pasatiempos favoritos quizás. Todo aquello que sea susceptible de ser descifrado es lo mío! El ejercicio fue interesante pero inservible en términos prácticos. Aprendí a pronunciar, pero sin entender lo que leía. Sin embargo, de algo me ha servido en varias ocasiones, no todo fue perdido (me doy ese consuelo). Las imágenes idílicas de las revistas que fueron mis tesoros mostraban los colores de un país gigante cuyo nombre tenía un peso enorme en todos los rincones del mundo por aquellas épocas de "cortinas de hierro", "pactos de Varsovia" y "guerras frías". Era muy niña para entender sistemas tan complejos. Amaba la Unión Soviética por los rostros blancos y perfectos, por los vestidos extrañamente adornados, por el primer hombre en el espacio y por la primera perra (ahora me avergüenzo de haber siquiera sentido que fue una heroína cuando en realidad fue una triste víctima de la prepotencia humana). Unos pocos años más tarde la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, quince en total, pluriétnicas, multilinguísticas, multiculturales, dejaron de conformar el país más grande del mundo. La Perestroika de Mijail Gorbachov sepultó la primera Revolución proletaria del mundo. Leningrado volvió a ser San Petersbugo y Stalingrado no recuperó su antiquísimo nombre sino que fue rebautizada como Volgogrado. Atrás quedarían los desfiles del otrora poderoso ejército rojo, una coreografía perfecta que acompañaba las exhibiciones de misiles y otros adminículos de guerra con los que desafiaba a los gringos y sus aliados.
Pregnant Woman, 1919 |
Para la Primera Guerra, él se enlistó; a la segunda fue obligado a ir. A pesar de eso, el régimen nazi destruyó parte de su trabajo y Otto fue calificado de "artista degenerado". Por fortuna, no todo fue pasto de las llamas, muchas de sus obras sobrevivieron a la censura y al castigo y son exhibidas en muchos museos del mundo. Este hombre es una de aquellas almas sensibles, como Edgar Allan Poe o Rainer Maria Rilke, que tienen experiencias militares que al tiempo que minan sus estados de ánimo son vivencias que saben aprovechar, transformándolas en detonantes de su genio creador. La pintura a continuación por ejemplo, muestra a tres hombres que no son normales, todos tienen amputaciones, heridas, etc. Se llama "inválidos de guerra jugando a las cartas". Después de la guerra la vida sigue, para algunos con menos consecuencias que para otros. ¿Qué pesará más, la herida en el cuerpo, o aquella en el espíritu?
Self-portrait as Mars, 1915 |
Otto Dix - Calavera (1924) |
Rusia es uno de aquellos lugares del planeta que he tenido desde siempre en mis afectos. El idioma fue un punto de encuentro desde mi infancia, cuando comencé a aprender -por mi propia cuenta y riesgo- a descifrar los que parecieran jeroglíficos que se me antojaban atractivamente misteriosos. Descifrar. Esa palabra ha estado en mi información genética tal vez, entre mis pasatiempos favoritos quizás. Todo aquello que sea susceptible de ser descifrado es lo mío! El ejercicio fue interesante pero inservible en términos prácticos. Aprendí a pronunciar, pero sin entender lo que leía. Sin embargo, de algo me ha servido en varias ocasiones, no todo fue perdido (me doy ese consuelo). Las imágenes idílicas de las revistas que fueron mis tesoros mostraban los colores de un país gigante cuyo nombre tenía un peso enorme en todos los rincones del mundo por aquellas épocas de "cortinas de hierro", "pactos de Varsovia" y "guerras frías". Era muy niña para entender sistemas tan complejos. Amaba la Unión Soviética por los rostros blancos y perfectos, por los vestidos extrañamente adornados, por el primer hombre en el espacio y por la primera perra (ahora me avergüenzo de haber siquiera sentido que fue una heroína cuando en realidad fue una triste víctima de la prepotencia humana). Unos pocos años más tarde la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, quince en total, pluriétnicas, multilinguísticas, multiculturales, dejaron de conformar el país más grande del mundo. La Perestroika de Mijail Gorbachov sepultó la primera Revolución proletaria del mundo. Leningrado volvió a ser San Petersbugo y Stalingrado no recuperó su antiquísimo nombre sino que fue rebautizada como Volgogrado. Atrás quedarían los desfiles del otrora poderoso ejército rojo, una coreografía perfecta que acompañaba las exhibiciones de misiles y otros adminículos de guerra con los que desafiaba a los gringos y sus aliados.
Rusia está lejos geográficamente pero es parte mía desde siempre, sin embargo más lejos aún, en una ciudad llamada Khabarovsk cerca de la frontera que divide Rusia de China, dos muchachos: Michael Draw y Marie Slip, unieron talentos y creatividad para crear una de las bandas más maravillosamente oscuras de la era post-soviética: Otto Dix. Encontrar esta banda de Darkwave significó también encontrar a aquel pintor no tan nombrado pero igualmente inspirador. Estos chicos, admiradores de su obra por supuesto, le hicieron un gran homenaje tomando su nombre para sí y permitieron que personas como yo entráramos en las formas expresionistas, vanguardistas de la pintura de aquel Beloved German, a quien en la canción preguntan si sabe ¿Qué es la felicidad? como si alguien pudiera dar respuesta a una de las abstracciones más perseguidas y poco encontradas de nuestro paso por este mundo.
Michael Draw, es un ser de belleza andrógina que se acopla perfectamente a esa voz con registro de contratenor con la que interpreta las letras que él mismo escribe. El resultado de esta conspiración artística es una explosión de melodías que no son fáciles de describir. Esta es una de aquellas bandas que es necesario escuchar. Su música es la conjunción perfecta, es la luz y la oscuridad, el cielo y el infierno, lo bello y lo terrible; es aquel miedo que atrae, aquel momento trágico al que nos lanzamos sin reparos, esas llamas que pueden herirnos y aniquilarnos pero a las que nos entregamos en el medio de un éxtasis incontrolable, es la guerra y es la paz (recordando a su coterráneo Dostoyevski).
San Petersburgo, la antigua capital del Imperio Ruso, les permitió involucrar a otro cómplice, Petr Voronov. Diestro ejecutante del violín, bueno, del electro-violín. Pues dadas las características de la música de Otto Dix no podía ser un violín tradicional el que acompañara sus exquisitas creaciones como esta "Старик" (anciano) del álbum Зона Теней (Zona de Sombras) de 2009.
Антихрист-Anticristo, del álbum Город de 2006 es una de las canciones de la banda que más me sorprende. El tañido de campanas da inicio a una pieza siniestra pero sinuosa, felina, serpenteante, en segundos una especie de rugidos se une a la música dando inicio a esta comunión que se completa con la voz de Draw. Ella juega a la perfección con la densidad de Slip en sus máquinas musicales. No es extraño que al escucharla, los espíritus del movimiento se apoderen de nuestros cuerpos para propiciar una danza que al compás de esta maravilla, no puede dejar de parecer un ritual en honor a deidades que están más allá de cualquier raciocinio.
Michael Draw, es un ser de belleza andrógina que se acopla perfectamente a esa voz con registro de contratenor con la que interpreta las letras que él mismo escribe. El resultado de esta conspiración artística es una explosión de melodías que no son fáciles de describir. Esta es una de aquellas bandas que es necesario escuchar. Su música es la conjunción perfecta, es la luz y la oscuridad, el cielo y el infierno, lo bello y lo terrible; es aquel miedo que atrae, aquel momento trágico al que nos lanzamos sin reparos, esas llamas que pueden herirnos y aniquilarnos pero a las que nos entregamos en el medio de un éxtasis incontrolable, es la guerra y es la paz (recordando a su coterráneo Dostoyevski).
San Petersburgo, la antigua capital del Imperio Ruso, les permitió involucrar a otro cómplice, Petr Voronov. Diestro ejecutante del violín, bueno, del electro-violín. Pues dadas las características de la música de Otto Dix no podía ser un violín tradicional el que acompañara sus exquisitas creaciones como esta "Старик" (anciano) del álbum Зона Теней (Zona de Sombras) de 2009.
The warmth went away from my hands
My eyes don’t see the light.
A mirror told me lie again
And me so many years as yet.
My eyes don’t see the light.
A mirror told me lie again
And me so many years as yet.
The sand in glass flows, flows.
A hoarfrost sparkles on my temples.
A liquid ice flows in my veins.
There is no light in my eyes.
A hoarfrost sparkles on my temples.
A liquid ice flows in my veins.
There is no light in my eyes.
Old age made a thoughts slow
Conducts a blood with water
And fills my days with misery
Of dreams forever young
Conducts a blood with water
And fills my days with misery
Of dreams forever young
Old age made a thoughts slow
Infused my soul with fear
And make fastens the silence on the mouth
Infused my soul with fear
And make fastens the silence on the mouth
The sun getting cold will become a stone
And a fire will not get back
And a fire will not get back
The sun getting cold will become a stone
And a fire will not get back
And a fire will not get back
translated by mantrid
Антихрист-Anticristo, del álbum Город de 2006 es una de las canciones de la banda que más me sorprende. El tañido de campanas da inicio a una pieza siniestra pero sinuosa, felina, serpenteante, en segundos una especie de rugidos se une a la música dando inicio a esta comunión que se completa con la voz de Draw. Ella juega a la perfección con la densidad de Slip en sus máquinas musicales. No es extraño que al escucharla, los espíritus del movimiento se apoderen de nuestros cuerpos para propiciar una danza que al compás de esta maravilla, no puede dejar de parecer un ritual en honor a deidades que están más allá de cualquier raciocinio.
Dark waters wash the world
Chronics crumple time into a ball
The world disobeys the laws of nature
Trying to get rid of the burden of Death
Chorus:
The Antichrist is already here, amongst you
He looks at the world through your eyes
In everyone he has aroused a grain of darkness
Perhaps he is you or me
Sweet stories in glass syringes
In books which will not be read
In eyes and smiles a little bit drunk
Idols who everyone will soon forget
All is gossip and human vanity
Having left the womb, we simply die
Gently the neon erases, blinking
The unsteady gap between Heaven and Hell
Chorus:
The Antichrist is already here, amongst you
He looks at the world through your eyes
In everyone he has aroused a grain of darkness
Perhaps he is you or me
Llegué a Otto Dix como he llegado a toda la música que escucho. Por azar. Buscando texturas sonoras, delicias para alimentar mi espíritu, redes tejidas de ondas musicales donde poder descansar mi maltrecha alma. Aprendí a usar lo que en mi época de infancia se conocía como equipo de sonido, poniendo a rodar aquellos enormes, negros, brillantes y delicados acetatos que al ser tocados por la también delicadísima aguja reproducían lo que para mí se convirtió en mi mayor afición, la música clásica. Conocí a Shubert, Mozart, Beethoven, Mendhelson, Tchaikovsky, Dvorak, Chopin, entre otros, gracias a una pequeña colección que tenía mi padre. Encontré entonces en la magia de la radio un mundo infinitamente más amplio. Descubriría así a Johann Sebastian Bach, y encontraría un regocijo sin igual, inefable, sublime, conmovedor, religioso en su música. Es tal vez este gusto el que me permite disfrutar al punto más extremo de mis emociones auditivas y espirituales, la música de estos rusos. No importa que no entienda lo que dice realmente, la voz es un instrumento más, esos sonidos ajenos a mi lengua materna, no hacen más que enriquecer mi experiencia.
Claro, que yo no me iba a quedar con la duda de la temática de las canciones, me preparé para decepcionarme, como me ha pasado en sinnúmero de ocasiones con lenguas que no domino. Pero con Otto Dix, la decepción no ha tocado a mi puerta. Con ustedes Fetichismo- Фетишизм del álbum Эго - Ego de 2005.
We are growing ourselves second skin,
And underneath it, the new flesh flutters.
At nights sinful dreams trouble us,
And for that God doesnt love us.
Sinners, sinners,
Repent!
From your idols
Renounce!
Look at us, we are similar to you,
And like you, we are used to betray gods.
Our souls are tightened into black leather,
And in godlessness, its so easy to accuse us.
Sinners, sinners,
Repent!
From your idols
Renounce!
We are choosing masters and slaves for ourselves.
By confessing in sins, we are standing on knees,
And we stretch our hands to the heaven in preys,
But the God will forgive just his favorite ones.
Sinners, sinners,
Repent!
From your idols
Renounce!
You are exactly like us, the fetishists!
And reading prayers hardly in syllables,
With a look you caress covers of the Blessed Virgin,
With lips pressing against pierced feet...
Sinners, sinners,
Repent!
From your idols
Renounce!
Sea of hands
Leviathan controls.
Silent Sound
Poison in the flesh comes through.
At the heart of frost
Blossoming, not melting.
Become a Goddess
Draggle-tail dreams.
Sea mouths
Asmodeus governs.
Who is ready
He leaves his path.
At the heart of frost
Blossoming, not melting.
Becoming a slave
Queen of dreams.
Sea´s Eye
Lucifer controls.
Who's waiting for us,
He kills us.
At the heart of frost
Showering, melted.
Becoming a man
Androgen is not dreaming.
Chorus:
We give you a sense
We erase your mind,
We sell you the idea
And you pay for paradise
We give you water,
We feed you bread
We sell freedom,
And you pay for air.
Las temáticas de la música de Otto Dix son exactamente lo que esperamos: nuestra existencia. Hay siempre un cuestionamiento hacia aquellos dogmas heredados a veces, que marcan nuestro paso por este mundo, que nos enajenan, nos aislan y nos enceguecen de vez en cuando. Por eso quizás no me sorprendió encontrar una canción llamada Semántica, y vaya la semántica que toca, nada menos que el significado de Dios. Incluída en el álbum Город - Ciudad, de 2006.
God - semantics of words,
A semantics of dreams,
A semantics of tears and minds.
To burn – means to warm
To breathe – means to sing
To sleep – means to fly
All our life is the study of the words.
Every word have a meaning
Our desires mean- suffering.
This meaning is justification
God - semantics of words,
A semantics of dreams,
A semantics of tears and minds.
To burn – means to warm
To breathe – means to sing
To sleep – means to fly
Hidden by words all our weaknesses
From the greatest one to the smallest
We choose the words they way they are useful for us
The end so often calls evil as good
God - semantics of words,
A semantics of dreams,
A semantics of tears and minds.
To burn – means to warm
To breathe – means to sing
To sleep – means to fly
(traducido por mantrid)
By the nights we going away to our dark realms,
Strew with the white ash our burning wounds.
And the sky will punish us for all our dreams.
But nobody will rule, nobody will hear
Nobody is needed, we love nobody.
We’ll be such not as all other mankind.
We sold our souls to the shades so cheap.
Somebody infuses the poison of devotion to our ears.
We’ll be such not as all other mankind.
We sold our souls to the shades so cheap.
Somebody infuses the poison of devotion to our ears.
The strip of white ash - our eternal block.
There is no pain nor fear at the place, where we going.
Our time as the water flows away through the fingers.
There, where we going, nobody will catch us.
There is no pain nor fear at the place, where we going.
Our time as the water flows away through the fingers.
There, where we going, nobody will catch us.
Just that, who is liable to doubts may survive
Who could pretend to be his own shade.
Not to feel compassion, not to feel pity -
that’s all what we may, that all remained for us
Who could pretend to be his own shade.
Not to feel compassion, not to feel pity -
that’s all what we may, that all remained for us
Agradezco la corrección de Lenushka7. Svidania.
Discografía de Otto Dix
- Эго (Ego) (2005) (As Отто Дикс)
- Город (City) (2006)
- Атомная Зима (Atomic Winter) (2007)
- Эго (Переиздание) (Ego) (2007) (Reissued)
- Атомная Зима + Remixes (Atomic Winter) (2008)
- Зона Теней (Shadow Zone) (2009)
- Чудные дни (Wonderful Days) (2010)
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